Volver a empezaaar, otra vez.

Pues el lunes pasado volvieron los horarios, los libros, los bolis Bic y el aburrimiento temporal. Más cañero que 1º, 2º de bachillerato nos está avisando de que le va el sado, y que tiene látigos para darnos a todos. Y esto me gusta, a ver si se me quita la perrería de una vez. Pero no todo es malo. Hay vida más allá de los diablos sadomasoquistas (comunmente llamados profesores). Y es la vida del fin de semana. Hasta que vengan los exámenes se vana basar en salir, bailar y hacer el vago. Pero todo controladísimo, porque también se tiene uno que plantear de empezar a hacer el TdR. Lo dicho, que ayer se inauguramos el curso con la asistencia a la grabación del concurso de belleza World Fashion Faces (muy, insisto, MUY casero), una cena en casa de N. (Deliciosa. Ya te dije que por el Pilar te vienes a mi casa sí o sí, todo incluido), y sesión medio vacía en Wonder, que que penita me da, tan grande y útil que podría ser, y tan mal la llevan. Cuando sea millonario la compraré y la llevaré como se merece. Pobrecita. Y como va siendo normal últimamente, no tengo fotos. Así que pongo un vídeo de Lady GaGa, mi hermafrodita favorita (que aún no sé si lo es o no). Es una canción de la reedición de su primer disco, Disco Heaven, que pasó desapercibido por todo el planeta y ahora resulta que es genial.


Es tan genial. Aiss.

xo,
rt.